El Chile ¡Aunque pique me lo como! Conoce sus beneficios para la salud

La cocina mexicana no se entiende en el mundo sin el chile, el picante que a muchos agrada y a otros atormenta al más mínimo contacto en salsas, caldos, polvo o como aderezo en diversos guisados, está comprobado, científicamente, que es sano para la salud.

El chile es una excelente fuente de vitaminas: contiene vitamina A, conocida también como retinol, que ayuda a la formación y mantenimiento de dientes, tejidos blandos y óseos, de las membranas mucosas y de la piel, aunado a la pigmentación que le da a la retina, fomentando una perfecta visión; vitamina B, que intervine en el crecimiento, en la producción de diversas hormonas vinculados con el desarrollo y en el buen estado de las neuronas; vitamina C, de la cual está comprobado que, el chile contiene siete veces más de esta vitamina, que la naranja, previniendo así la gripe y demás infecciones.

Además, el chile previene el envejecimiento prematuro, por el alto contenido de proteínas que aporta y mejora, paulatinamente, el proceso digestivo, evitando problemas estomacales.

El chile, también, es capaz de aliviar ciertos dolores gracias a la capsaicina, que contiene,  la cual libera súbitamente la histamina (sustancia participante en la percepción del dolor en el cerebro), ocasionando un efecto calmante contra dolores de cabeza o molestias leves en tejidos musculares. Los expertos ubican al chile cómo una gran ayuda para sobrellevar los síntomas de la resaca; igualmente, despierta el apetito, ayuda a desechar las toxinas, toda vez que, el picante en sus semillas, provoca que el individuo sude en exceso o libere mucosidad, como respuesta de su efecto en la lengua y el aumento en la temperatura corporal.

La doctora Martha Irasema Peña, adscrita el Instituto Mexicano del Seguro Social en Puebla, asegura que, entre más de 130 tipos de chile existentes, los médicos recomiendan el consumo, moderado, del "verde" o serrano, así como el habanero, largo, jalapeño, de árbol, poblano y la chilaca, al ser los más nutritivos y sanos que otros. Y, advierten sobre el consumo del ancho y el pimiento, ya que contienen más calorías.

Se sabe que el chile aporta 7 veces más vitamina C que la naranja, por lo que es considerado extraordinario en la prevención de la gripe común y demás infecciones.

Diversos estudios han demostrado que el consumo de chile en la dieta diaria disminuye la mortalidad por cáncer. Esto gracias igualmente a la capsaicina que se adhiere a las proteínas, en la mitocondria, de las células cancerosas, generando su disolución.  El doctor Sören Lehmann, estudioso de los beneficios de este fruto alrededor del mundo, experimentando en ratones, asegura que el chile,  frena el desarrollo de los tumores de próstata.

Aunque, se sabe el consumo de chile estimula la producción constante de endorfinas, ocasionando una especie de adicción, no está comprobado que genere algúna reacción psicológica o emocional. Se ha estudiado que, personas que consumen grandes cantidades de picante, han experimentado un índice menor de tromboembolias (coágulos de sangre severos), toda vez que, el chile es considerado un anticoagulante natural, mejorando la circulación, preservando la integridad de los vasos capilares y eliminando posibilidades de padecer alguna enfermedad cardiaca por estas causas.

Además de ser considerado como un orgullo de la gastronomía mexicana, investigadores de la Universidad de Tasmania demostraron que el chile ayuda a controlar los niveles de insulina en la sangre, lo cual es benéfico para las personas con obesidad y diabetes. Además, al ser un antioxidante natural, lucha contra las enfermedades que causan las toxinas.

Es importante mencionar, que como todo, el chile en exceso puede provocar irritación estomacal y asimismo no se recomienda para las personas que padecen de gastritis o colitis. Por lo que, pese a sus enormes beneficios, siempre se debe consultar con al médico, o bien con un nutriólogo, si se experimentan molestias relacionadas con su consumo.

Todo lo anterior hace pensar que, un buen mole, un rico taco aderezado con salsa verde o roja o una buena mordida a un chile, puede ser equivalente a un gran bálsamo a la salud.