La mayoría de los síntomas de la leucemia aguda son causados por la falta de células sanguíneas sanas en tu suministro de sangre. Los síntomas suelen comenzar lentamente y luego rápidamente como una escalada, tanto en la gravedad, como en la explosión del número de células infectadas en la sangre.
Los síntomas de la leucemia aguda incluyen:
- Piel pálida
- Cansancio
- Falta de aliento
- Tener infecciones repetitivas en un corto espacio de tiempo
- Hemorragias inusuales y frecuentes, tales como encías sangrantes, hemorragias o la nariz
- Fiebre y sudores
- Huesos y dolor en las articulaciones
- Moretones con facilidad en la piel
- Inflamación de los ganglios linfáticos (glándulas)
- Hinchado el hígado
- Bazo hinchado
- Pérdida de peso
Si tú o tu hijo, tiene todos o algunos de estos síntomas, todavía es muy poco probable que la leucemia aguda sea la causa.
En algunos casos de leucemia aguda, puede propagar las células de tu sangre al sistema nervioso central. Esto puede causar una serie de neurológicas (relacionadas con el sistema nervioso), síntomas que incluyen:
- Dolores de cabeza
- Convulsiones
- Vómitos
- Visión borrosa
- Mareos