Existen muchas causas de cirrosis, pero beber alcohol y la infección por hepatitis C son las causas más comunes.
Cirrosis causada por Alcohol
El hígado descompone los residuos tóxicos y venenos, como el alcohol, pero un exceso de estas sustancias puede dañar las células del hígado. Si eres un bebedor, las posibilidades de desarrollar cirrosis aumentan. Sin embargo, la cirrosis del hígado no es sólo una condición que afecta a las personas dependientes de alcohol (alcohólicos). Si eres un gran bebedor social, también puedes desarrollar cirrosis.
Los problemas por el alcohol por lo general se desarrollan después de 10 años o más de beber, y afecta a aproximadamente el 10% de los bebedores.
Hepatitis C y Cirrosis
La hepatitis C es un problema en la sangre infectada que puede causar daños al hígado que, con el tiempo, puede convertirse en cirrosis. Otras formas de la infección, la hepatitis B y D, también pueden causar cirrosis.
Otras Causas de la Cirrosis
Un número de otras condiciones y enfermedades hereditarias que impiden que la función del hígado sea normal. Por ejemplo:
* Insuficiencia cardpiaca: Si has tenido varios casos de insuficiencia cardiaca, puedes causar presión arterial alta y la congestión en el hígado.
* Hepatitis autoinmune: Normalmente, el sistema inmunológico hace anticuerpos para atacar a las bacterias y los virus. Sin embargo, si tienes una enfermedad autoinmune, como la hepatitis autoinmune, tu sistema inmune hace que los anticuerpos ataquen a los órganos sanos del cuerpo, tales como el hígado.
* Cualquier condición que causa que los conductos biliares sean bloqueados.
Si tienes diabetes tipo 2 y desarrollas cirrosis, la condición diabética puede empeorar.