Cáncer de piel (no-melanoma) Prevención

Evitar el Exceso de Exposición al Sol


La mejor manera de prevenir el cáncer de piel es evitar la sobre-exposición al sol.


Esto no quiere decir que debes evitar por completo la luz del sol. La luz del sol favorece la producción de vitamina D, que es necesaria para que el organismo pueda producir calcio. Asimismo, la investigación ha demostrado que la vitamina D puede prevenir otros tipos de cáncer, y enfermedades cardiovasculares (las condiciones que afectan el flujo de sangre), tales como los accidentes cerebro-vasculares.


Si tienes una condición que suprima tu sistema inmune, o estás tomando una clase de medicamentos conocidos como inmunosupresores, debes de de evitar la luz solar. Esto se debe a que se tendrá un mayor riesgo de contraer cáncer de piel. Si este es el caso, tomar suplementos de vitamina D para compensar la falta de luz solar puede ser beneficioso. Tu médico de cabecera será capaz de aconsejarte sobre este tema.


Evita el Sol a Medio Día


El sol es generalmente más caliente alrededor de mediodía, pero también puede ser muy fuerte, y tener efectos potencialmente perjudiciales, en la mañana y durante la tarde y las primeras horas de la noche. Por lo tanto, deberías evitar estar por largos períodos de tiempo en el sol, en cualquier momento durante el día, y asegúraste de usar el protector solar adecuado para tu tipo de piel.


Protector Solar


Al comprar protección solar, asegúrate de que es adecuado para tu tipo de piel, y ambos bloques ultravioleta A (UVA) y B (UVB) de radiación. En la mayoría de los casos, factor de protección solar 15 (SPF 15) debe de ser adecuado para el clima de ciudad, pero se puede que requieran un mayor SPF en los climas más cálidos.


El protector solar debe aplicarse unos 15 minutos antes de salir al sol, y de nuevo cada dos horas. Si estás planeando pasar tiempo en el agua, debes usar un protector solar resistente al agua.


Ropa que Protege del Sol


Si no puedes evitar estar por largos períodos de tiempo en el sol - por ejemplo, si tienes un trabajo que te obliga a trabajar fuera, debes usar la ropa que proporcionará protección contra el sol. Esto debería incluir un sombrero para proteger tu cara y cuero cabelludo, y gafas de sol para proteger tus ojos.


Protección de Niños y Bebés


En comparación con los adultos, la piel de los bebés y los niños es mucho más sensible, y la exposición repetida a la luz del sol puede dar lugar a cáncer de la piel en desarrollo en etapas posteriores de la vida. Antes de salir al sol, asegúrate de que tus hijos están vestidos apropiadamente, y que se lleven un sombrero, y un alto factor de protección solar.


Prevenir antes que Curar

Si no puedes evitar estar por períodos prolongados de tiempo en el sol, es muy importante asegurarse de que no recibes los rayos directamente.


Cada vez que tus células de la piel están expuestas a intensos niveles de radiación, la probabilidad de que se produzca una mutación aumenta. Esto puede conducir a cáncer de la piel en desarrollo, ya sea en el corto plazo, o muchos años después.


Camas y Lámparas de Luz Ultravioleta


Las camas y lámparas pueden ser más peligrosas que la luz solar natural, ya que su uso crea una fuente concentrada de los rayos ultravioleta A (UVA) y la radiación.


La radiación ultravioleta puede aumentar tu riesgo de desarrollar melanomas malignos - el tipo más peligroso de cáncer de piel. Rayos UVA y lámparas de luz ultravioleta también puede causar envejecimiento prematuro de la piel.


Es aún más importante evitar el uso de camas solares y lámparas de luz ultravioleta si te encuentras en uno de los grupos de alto riesgo de desarrollar cáncer de piel.


Si insistes en el uso de camas solares, o lámpara de luz ultravioletas, es recomendable que no tengas más de 20 sesiones de bronceado por año, y que cada una de éstas no dure más de 10 minutos.