La anemia es una condición que se presenta cuando hay un número reducido de glóbulos rojos en la sangre, condición conocida como concentración de hemoglobina.
Existen varios tipos de anemia y cada uno tiene una causa diferente; la más común es la carencia de hierro: en estos casos, el cuerpo no es capaz de mantener la cantidad necesaria de glóbulos rojos para hacer que el organismo funcione correctamente.
El hierro es un componente esencial de la hemoglobina y es la sustancia que ayuda a almacenar y transportar el oxígeno en los glóbulos rojos. Si falta de hierro en la sangre, los órganos y tejidos no obtendrán la cantidad de oxígeno que normalmente necesitan para trabajar. Existen también otras formas de anemia causadas por falta de vitamina B12 o ácido fólico en el cuerpo.
El tratamiento para la anemia por carencia de hierro suele ser muy eficaz, y la condición rara vez causa graves complicaciones. La sangre puede requerir un seguimiento cada pocos meses después de tu diagnóstico para comprobar que estás respondiendo al tratamiento y que tus niveles de hierro han regresado a la normalidad.